La obra es un homenaje a quienes entregan sus vidas al sacrificio del rock, y al rock mismo, como filosofía de vida, más que como estilo musical. Para ejemplificar dicho sacrificio, el artista toma a tres pilares de la música argentina y los incrusta en la imagen real, como si se trataran de fantasmas protectores de una tribu que sigue vigente.
La imagen central nos muestra al mismo rock crucificado y muerto, a punto de resucitar. Los cientos de elementos que rodean esta imagen, representan la diversidad, la pluralidad, los inicios y las ramificaciones de un género que cruzó, más que cualquier otro, la historia de la música.
El concepto de la imagen de la crucifixión cristiana, lleva a pensar en una muerte no definitiva, ya que es seguida de una casi inmediata resurrección, por lo que, el dicho que reza: “el rock murió”, quedaría relegado a una cuestión temporal. Es decir, según el artista, puede ser que el rock haya muerto, pero es cuestión de tiempo para que, luego de rozar los infiernos, habitad natural del género representado, este resucite de entre los muertos, y vuelva a reinar entre los distintos estilos musicales y de vida.
La escena esta compuesta por más de cuatrocientos elementos, una modelo y una única imagen insertada a traves del programa photoshop. Dicha imagen es apenas perceptible.
MOURA
"Ruega Por Nosotros"
LUCA
"Ruega Por Nosotros"
"Ruega Por Nosotros"
"Ruega Por Nosotros"
Muy buenas las fotos, ya las he linkado a un blog de un amigo con un montón de entradas porque es algo que hay que ver...
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