texto Sebastián Santamaría
ilustración Matu Santamaría
¨En sus agendas, seguramente, los numeros más marcados serían los de Paris Hilton y los de Lindsay Lohan¨.
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Así es... nos oprimen la maldad y la desigualdad. A cada instante aparecen personajes malignos, iconos de grandes imperios económicos o religiosos, tiranos desalmados con ansias de gloria o simplemente, algún desquiciado con ganas de causar dolor. La fuerza pública, suele no dar a basto o forma parte del enemigo, los gobernantes se desesperan y los pueblos enteros comienzan a rogar, a pedir, a suplicar... ante la ausencia inmediata de Dios, todos sabemos que Él tiene "sus formas y tiempos", irremediablemente, por ese grabado a fuego que nos ha dejado el cine a lo largo de sus cintas, queriendo o sin querer, todos miramos al cielo esperando ver la estela rojiza de una capa que surque el celeste de la eterna bobead celestial. Si la capa no es roja, será azul, o negra, o verde, según el súper héroe de cabecera, pero siempre ocultará una identidad y siempre, la identidad oculta, será la identidad falsa.
A lo mejor, porque en la época que nos toca vivir, los personajes malignos y las situaciones de extremo dolor popular se multiplican a cada respiro, el inconsciente colectivo, ha empezado, sin darse cuenta, a mirar al cielo.
¿Será un pájaro? ¿Será un avión? ¿Quiénes y cómo serían los súper héroes de este nuevo tiempo? Convencido por la ciclicidad y la poca originalidad hollywoodense, me atrevería a asegurar que la plantilla de súper amigos (no me animo a decir súper hombres, recordemos que superman, por poner un caso, es un extra terrestre) sería la misma que nos viene salvando el pellejo hace décadas, claro que...con algunos cambios.
Como en la antigua Grecia, estos semi dioses tomarían un lugar de privilegio, la humildad que los caracterizaba antaño, quedaría disuelta por los flashes de las revistas rosas y los VIP´s de los diferentes lugares nocturnos le quitarían fuerzas y horas de trabajo. Todas las portadas tendrían sus sonrisas y envidiados cuerpos. Tanto ellos como ellas, tendrían la potestad de salir con quien quisieran, tan codiciados serían que casi nadie les diría que no. Marcarían tendencias, modas y hasta serían nuestros gurúes religiosos. No les haría falta ser muy inteligentes, no tendrían que decir frases profundas para que estas pasen a formar parte del vocabulario de todos, habría miles de groupies esperando en las puertas de las guaridas secretas, que ahora tendrían grandes carteles de Leds con los isologos de cada personaje. Todos los programas de televisión hablarían de ellos todo el tiempo y hasta podrían, si quisieran, tener su propio programa.
Las redes sociales, desarrolladas en secreto por la corporación B.DIAZ, serían las nuevas autopistas del poder... superman tendría tres o cuatro millones de fans en Facebook, Robin formaría un grupo en apoyo a la comunidad gay y esto lo ayudaría a asumir su sexualidad, lo que le daría un protagonismo impensado y lo pondría entre los más influyentes del año y en la portada de la revista PEOPLE. La batiseñal quedaría obsoleta y vetusta ante la formidable Blackberry de "batman.heroe@BlackBerry.com" en comunicación directa con el comisionado Fierro mediante MSN. Wonder Woman y Cat Woman, pasearían por La Quinta Avenida, con sus bolsas de compras y sus pechos, enormes y perfectos, rígidos por la siliconas y a la vista... las horas de pilates marcadas en los abdominales y la cama solar a punto de causarles un súper cáncer de piel. En sus agendas, los números más marcados serian los de Paris Hilton y Linsay Lohand, con quienes habrían protagonizados un par de vídeos de alto contenido lesbio. Robin seguiría creciendo en popularidad y conocería a Ricky Martin.
Los anabólicos y las hormonas de crecimiento, sumado a las nuevas técnicas de entrenamiento, harían de estos súper héroes, monstruos tallados como arboles con músculos de acero que le sobresaldrían de sus miembros... el exceso de sustancias, llevaría a algunos de nuestros héroes a ciertos desequilibrios emocionales, por lo que aveces los veríamos irascibles, o lloriqueando por los rincones, La Mole, totalmente deprimido, iría al analista por sentirse un hombre frío y con corazón de piedra. El súper hombre araña versión 2011, dado el frenesí con el que viviría, sufriría ataques de ansiedad, de los que derivaría una suerte de eyaculación precoz, impidiéndole lanzar a tiempo sus tela arañas. El Capitán America tendría su propio canal en YOuTUbe donde contaría su historia día a día y llevaría un minucioso detalle de como sus compañeros Héroes, lo dejan de lado por no ser tan "Súper"... La Mujer Araña postearía sus fotos en Flickr, Facebook y Twitter donde además, prometería mostrar mucho más si llegase a aumentar su cantidad de amigos hasta cierto numero. El hombre Invisible, harto de no ser visto ni reconocido, firmaría un contrato con MTV para llevar adelante un reality show sobre su vida.
En definitiva, los súper héroes hoy, por poderosos, fuertes, bellos y superiores... no serían más que una exacerbación de nosotros mismos. Una frase muy conocida dice que "los pueblos, tienen los gobernantes que merecen..." en este caso, tomando esa idea,con alguna modificación, la frase que cabría sería, tal vez sería..."los súper héroes, son coherentes a los tiempos en los que aparecen..." por lo que creo que: Los Súper Héroes del 2000 serían Súper frívolos, Súper consumistas, Súper superficiales, Súper Individualistas y con una gran dosis de Súper Estupidez.
(ss)
(s.s)
